viernes, 31 de agosto de 2018

Academia de Puertas Abiertas


De par en par
luz verde y la mejor voluntad.

“Academia de Puertas Abiertas”, espacio que abrió la Academia de Ciencias de Cuba para el debate e información de “enigmas y descubrimientos en la ciencia”, ha sido feliz idea que merece luz verde y la mejor voluntad.
Como espacio dirigido a toda la población dispuesta al debate público y a las controversias tecnocientíficas y sociotenológicas,  ha  contado con la intervención de reconocidos académicos y especialistas de la ciencia cubana. Sin dudas ha despertado el interés de muchos, aunque no a todos los que debiera.

Como en esta vida no hay nada tan bueno que no sea perfectible, “Academia de Puerta Abiertas”, merece mejor audio.
Si el discurso no llega audible con comodidad, se pierde la mitad de la comunicación. Igual si, por un afán de modernidad, mezclado con su poco de supuesta desenfadada formalidad, pareciera que estar cerca del auditorio, aproxima más al disertador al alma de la representación social.


No estoy muy seguro.
El hermoso y solemne paraninfo donde tiene lugar “Academia de Puertas Abiertas”, no puede perder su trascendencia. La modernidad no la da la tecnología, sino el uso que hagamos de ella. Nada indica que si el disertante sube al estrado destinado para la conferencia, parecerá pedante o demasiado jactancioso.
La tecnología en materia comunicacional que poseemos, la hubieran añorado en tales trances desde don Tomas Romay a Carlos Juan Finlay; desde el presbítero Félix Varela al brillante ingeniero Francisco de Albear. 

Y desde el estrado, con una buena pantalla y toda la eficiencia y eficacia de un PowerPoint, harían del alegato sociotecnologico una expansión entretenida, interesante, sustanciosa, maciza y mediática.
Obvio el calor tropical e insular/caribeño Y la falta de insonorización. Son demasiado evidentes y por ahí se debía comenzar.
Es raro y difícil lograr el equilibrio en cualquier ámbito de la vida.  
Son muchas las tareas que ahora mismo propone la Academia de Ciencias de Cuba.

En los predios de Cuba 460, entre Amargura y Teniente Rey, la joya patrimonial que la representa ha acogido todos los terceros jueves de cada mes, a las 10 de la mañana, el espacio “Academia de Puertas Abiertas”.
Ha sido feliz idea y  merece luz verde, continuidad y la mejor voluntad.
 
 

lunes, 20 de agosto de 2018

OVNI sobre La`bana.




 

Este sábado 18 de agosto de 2018, a las 12:18 minutos, por el cielo de La Habana pasó un OVNI.  La foto es prueba irrefutable. Iba camuflado en forma de nube y pocos lo percibieron. La incredulidad niega que haya vida fuera del sistema solar. La ingenuidad cree que sí y que han llegado mediante formas, texturas y materializaciones, aproximadas a la idea que tenemos los terrícolas. Y finalmente, los agnósticos arguyen que, después de tanto tiempo revoloteando alrededor, que no hayan decidido, por fin, contactar, va contra la lógica humana y la del más allá, incluyendo toda idea de Más Allá al que acudimos cuando no tenemos respuestas a la mano. No puede ser temor. Están más preparados que nosotros; de lo contrario, hubieran esperado un viaje al revés, con resignación. No estarían huyendo de sus desastres, para venir a un desastre en ciernes. No es curiosidad o turismo sideral. O aspirando a puertas abiertas académicas; no las hemos abierto. La mayoría terrícola sustenta el ideal en un enfrentamiento feroz, descomunal y hasta la muerte. Es lo que nos enseña la historia universal...hecha en la Tierra. Y ellos deben saberlo.

La cuestión es que no les interesa Solo pasan, mimetizados; hacen un looping, un medio tonel, dos o tres rizos y desaparecen. Y dirán impacientes “Llegar o no llegar no es la cuestión”.

                                                                 

 

(Dedicado a los apasionados por la ciencia y las tecnologías; que escriben sobre tales ámbitos y por lo general se ganan su sustento haciéndolo. Pero sobre todo a mis amigos, practicantes incondicionales y poseedores, además de imaginación desbordada, de un sentido del humor a borbotones. Y sé que ahora mismo, reunidos en secreto dirán bajito, casi en susurro «Escondámosle la cámara unos días, hasta que se le pase la pasión de ánimo. Esta vez le ha dado fuerte». Y entre risas brindarían con cerveza, ron, vino, té, café o agua hervida, cada cual a su modo).